Artículo de interés: El holocausto de Mauthausen-Gusen
¿Cuándo empezó a torcerse todo, Zabalita? Con esta pregunta arranca la novela de Vargas Llosa titulada “Conversación en la Catedral”. Esta misma pregunta sería la que se hicieran los vecinos Luis Mendoza Fernández, Lorenzo Espinosa Casablanca y Alonso García Castuera el día que ingresaron en dos campos de concentración en territorio alemán. En abril de 1936, fecha del final de la Guerra Civil Española, se produjo un masivo exilio de refugiados republicanos a Francia. En lugares cercanos a la frontera, fueron ingresados en diferentes campos de refugiados, conviviendo en hacinados barracones con unas pésimas condiciones sanitarias, sin acceso a agua potable y mal alimentados. Todo ello con la consecuencia de padecer numerosas enfermedades, tales como la avitaminosis, la sarna, la disentería, el tifus y, finalmente, la muerte. Apenas llevaban allí cinco meses, cuando el septiembre de 1939 estalla la Segunda Guerra Mundial. El Gobierno francés decretó que todos los hombres exil...